
Fe
El lasallista descubre el plan de Dios y lo promueve al interior de sí mismo; hace vida de ese espíritu de FE cuando mira todo con los ojos de la FE, lo hace todo con la mira puesta en Dios y lo atribuye todo a ÉL.
Fraternidad
Representa la capacidad para aceptar al otro y reconocerlo como un hermano. Es tener sentido de Comunidad, de grupo, en relación de interacción armónica, cordial y justa que favorece el crecimiento humano recíproco. Implica asumir la tarea de ver al otro como mi Hermano y no como un enemigo o un rival a que hay que aplastar. Asumimos el reto de sentir que “todo lasallista es mi hermano” y esto implica encarnar valores y actitudes tales como: la tolerancia, la justicia, el respeto, la acogida; con todos compartimos los bienes, las alegrías, las penas, los triunfos, los talentos y los fracasos. Nos perdonamos mutuamente, lo cual exige apertura, diálogo, entrega, comprensión y aceptación.
Justicia
Es la voluntad de dar a cada quien lo que le corresponde según la naturaleza humana, buscando una relación equitativa con los demás. Evidencia el equilibrio, actúa de corazón en el momento indicado.
Servicio
Muestra la sencillez del ser humano y el espíritu de colaboración. Es el medio efectivo para aplicar los principios de la fe y por medio de él, trabajar por la Fraternidad; todo Ser humano tiene una misión que cumplir y al realizarla cabalmente encuentra la felicidad. El servicio es darse sin esperar recompensa. “Yo no vine a ser servido, sino a servir”, nos dice Jesús en el evangelio; el servicio es disponibilidad, es compromiso, implica sentido de pertenencia por una Institución, por una región, por un país.
Compromiso
Es la obligación adquirida en el Bautismo y a través de la cual colaboramos en la construcción del Reino de Dios con las demás personas.







